Las aguas subterráneas se emplean de forma habitual por una gran variedad de usos, tales como consumo de agua potable, uso industrial, agrícola, ocio, etc. El conocimiento de sus características es básico para determinar correctamente si su aplicación es apta, o hay algún tipo de tratamiento para alcanzar la calidad requerida.
Por otra parte, las mismas aguas subterráneas pueden ser susceptibles de contaminación o control ambiental, tal como determina la normativa vigente. La medida y seguimiento de la contaminación de piezómetros y lixiviados es esencial para proteger suelos y acuíferos.
El laboratorio de Ematsa toma muestras y analiza con precisión y fiabilidad los parámetros necesarios para la caracterización del agua desde hace más de 25 años.
ACREDITACIONES
SERVICIOS